“Y OÍD”
(un poema de Enrique Falcón; España)
Y oíd:
Tempranos hombres negros han estado en mi casa
cargados con ganzúas y fusiles azules
les sigue una jauría con el resto dormido
de todo lo que oyeron en las cercas del mundo :
que la vida en los amantes cosiera tan despacio
un temblor en estas sienes
y una sed sobrecogida,
humana sombra extensa
lo que no sobrevive
cuando mudan los hombres
y la chusma encerrada
ya no puede quebrarse :
que un inútil huésped
con tu nombre en los dedos
entrará por tu puerta
sin tu lista de azúcar :
que un arcángel mudo
rasgará los uniformes
las banderas asesinas
los himnos nacionales tras tu sangre tasada.
Y oíd:
Soy la tierra perpleja que inclinan los soldados.
Tremendas uñas rotas se me llevan dormido.
En los límites del agua y en régimen de aislamiento
me atrevo a pronunciarte
y a ponerte en la lengua una loncha de tiza.
Y oíd:
Esto es lo que oyeron nuestros muertos previamente :
que caminan las palabras con un ángel en las manos
un niño amargo y loco que baila y amontona
los sueños de los escondidos cantándole y perdiendo :
que tú ya eres aquello que en la muerte se esconde
con el pan compartido de las celdas del mundo,
su piel y los incendios,
la fatiga del mundo
la carne muda y fría que te espera en el mundo.
Enrique Falcón
Profesor de literatura. Coordinador de Pastoral de Bachillerato